La Asociación Tambores de Teruel, uno de nuestros “clásicos” de El Pobo, volverá, como cada año desde el principio del Poborina, a nuestras calles para hacernos vibrar con sus toques de tambor y bombo.
Esta asociación nació con la idea de poder llevar la percusión tradicional, propia de nuestro territorio, más allá de la Semana Santa. Forma parte de la cofradía de la Oración en el Huerto y la marca Tambores de Teruel fue la elegida para poder seguir mostrando este sonido, que siempre había estado vinculado a la Semana Santa, en fechas y lugares distintos y por motivos no religiosos, ya fuera concentraciones, festivales de percusión, de folklore, etc. De esa forma han viajado dentro y fuera de nuestras fronteras: Soria, Segovia, Madrid, Marruecos, Francia… Cuentan con varios discos y DVDs donde muestran su trabajo desde el principio de su formación hasta día de hoy. El año pasado cumplieron su XXX aniversario, durante el cual fueron los anfitriones de su propio “festival” de música tradicional invitando a grupos como la Ronda de Boltaña, Mayalde, entre otros.
Son un grupo de alrededor de 300 apasionados o más bien “locos” del tambor a los que cualquier ocasión les parece idónea para colgarse el instrumento. Todo el grupo aporta su granito de arena para seguir creciendo y creando nuevos toques. De ahí que nunca se queden anclados en los mismos toques de siempre y consigan que, aunque con la misma esencia, cada año puedan enseñarnos y sorprendernos con sonidos diferentes. Cada integrante del grupo es importante, sus ideas y opiniones son tomadas en cuenta, lo que hace que el final el ambiente sea el de una gran familia con una misma “filosofía”, aquella que gira alrededor del tambor.
Esta afición llega, muchas veces, a edades muy tempranas y para ello crearon ya hace años su propia escuela, la única estable de la ciudad: la Escuela de Tambor y Bombo de la Oración del Huerto, donde los niños desde muy pequeñitos aprenden a tocar el tambor, pero sobre todo a disfrutar del él. Y de esa forma pueden contar para las diferentes actuaciones, tanto dentro como fuera de la Semana Santa, de varias secciones divididas por edades. Lo más sorprendente es poder ver a niños desde muy pequeñitos mostrando su toque de exhibición sin la necesidad de un mayor que les vaya marcando lo que hacer. Es el fruto de horas de ensayo y mucho trabajo por parte de sus profesores.
Lo que nos ofrecen es poder disfrutar de una de las tradiciones de nuestra provincia más espectaculares, su sonido es fuerte y contundente con el que harán retumbar las calles y sorprendernos a todos. Vendrá una representación del grupo, pero suficiente para que cuando toquen todos al unísono nos pongan los pelos de punta. Hay quienes bailan cuando los oyen, quienes se asustan, se emocionan, se sorprenden, diferentes sensaciones, pero está claro que nunca dejan indiferente a nadie.